Un arma secreta para devocion admirable de los 7 dolores de maria santisima

La Casto dijo a Santa Brígida de Suecia: «Miro a todos los que viven en el mundo para ver si hay quien se compadezca de Mí y medite mi dolor, mas hallo poquísimos que piensen en mi tribulación y padecimientos.

¡Santísima Doncella y Origen dolorosa! Poseído de cristiana compasión por el agudo dolor que padecisteis al anunciaros el santo profeta Simeón la futura pasión y muerte de vuestro santísimo hijo Jesucristo, mi adorable Redentor, os suplico humildemente, que os compadezcáis aún Vos de la penosa tribulación en que tiene puesto a este escaso hijo y siervo vuestro la tiranía de sus vicios y pasiones tan opuestas a la excelencia de vuestras virtudes y a la pureza de vuestro celestial amor.

Casto María: por las lágrimas que derramaste y el dolor que sentiste al ver a tu Hijo cargado con la cruz, como cargado con nuestras culpas, llevando el herramienta de su propio suplicio de muerte; Él, que era creador de la vida, aceptó por nosotros sufrir este desprecio tan ínclito de ser condenado a muerte y precisamente muerte de cruz, a posteriori de haber sido azotado como si fuera un malhechor y, siendo verdadero Rey de reyes, coronado de espinas; ni la mejor corona del mundo hubiera sido suficiente para honrarle y ceñírsela en su frente; en cambio, le dieron lo peor del mundo clavándole las espinas en la frente y, aunque le ocasionarían un gran dolor físico, aún anciano sería el dolor espiritual por ser una desprecio y una humillación tan conspicuo; sufrió y se humilló hasta lo indecible, para levantarnos a nosotros del pecado; te acompañamos en este dolor .

4. El avenencia con Jesús camino al Calvario: María encontró a Jesús cargando la cruz en el camino hacia el lugar de la crucifixión. En este dolor se reflexiona sobre el sufrimiento que implica presenciar el dolor del ser amado.

¡Oh Madre, tan afligida! No obstante que en la persona del apóstol Santo Juan nos acogiste como a tus hijos al pie de la cruz y ello a costa de dolores tan acerbos, intercede por nosotros y alcánzanos las gracias que te pedimos en esta oración.

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La Inexplorado de los Dolores representa el sentimiento de dolor de María, a lo grande de toda una vida, en presencia de el sufrimiento de su hijo, Jesús. Se alcahuetería de una de las devociones más antiguas hacia la Madre de Altísimo.

Al concluir el rezo de los 7 Dolores de la Virgen, puedes finalizar con una oración de agradecimiento y pedirle a la Doncella María que te acompañe en tu vida diaria y te ayude a existir en unión con su Hijo Jesús.

Esta devoción nos brinda la oportunidad de acercarnos a María y acorazar nuestra Convicción en momentos de dolor y sufrimiento. Es una modo de inspeccionar y compartir su dolor como madre y de averiguar su intercesión en nuestras vidas.

María nos asegura en esta Agudeza final: “He obtenido esta Agudeza de mi divino Hijo, que aquellos que propaguen esta devoción a mis lágrimas y dolores, serán llevados directamente de esta vida terrena a la bienestar eterna sin embargo que todos sus pecados serán perdonados y mi Hijo y yo seremos su eterno consuelo y Deleite”.

4. «Les alcanzaré cuanto me pidan, con tal de que no se oponga a la adorable voluntad de mi divino Hijo o a la salvación de sus almas.»

Rezar el Rosario de los Siete Dolores de la Inexplorado María es una actos devocional que nos permite unirnos a la Raíz de Jehová en su sufrimiento y encontrar consuelo, fortaleza y confianza en su intercesión maternal.

Virginal María: por las lágrimas que derramaste y el dolor que sentiste al ver la crueldad de clavar los clavos en las manos y pies de tu amadísimo Hijo, y luego al verle agonizando en la cruz; para darnos vida a Devoción admirable de Los 7 Dolores que María Santísima Sintió en la Vida y Muerte de su Amadísimo Hijo nosotros, llevó su pasión hasta la muerte, y éste era el momento cumbre de su pasión; Tú misma todavía te comprobaríFigura expirar de dolor en aquel momento; te acompañamos en este dolor.

 (María no dejó a su Hijo en el momento del dolor y aunque la escena no es referida en los evangelios no hay duda de que ella estuvo a su lado camino del Calvario, pero que estuvo al pie de la cruz).

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